Viševnik es un fantástico dosmil, que cuenta con algunos de los paisajes alpinos más increíbles del Parque Nacional de Triglav desde arriba. Escalar montañas durante el invierno suele estar reservado a los excursionistas y montañeros más avanzados. Por suerte, Viševnik ofrece una ascenso emocionante para cualquier persona con conocimientos básicos de escalada con el uso de un piolet y crampones. Una forma espléndida de disfrutar de las cumbres nevadas desde un gigante de fácil acceso.
El invierno en el Parque Nacional de Triglav es algo muy especial. Es difícil imaginar lo fascinante que es el paisaje montañoso en esta época del año. La única manera es experimentarlo de primera mano aventurándose en las tierras altas. Esta excursión le permite ser testigo y sentir la magia de uno de los rincones más pintorescos de Eslovenia. Debido a su magnífica accesibilidad, Viševnik es una subida muy popular entre los lugareños y los visitantes en cualquier época del año. Pero una ascensión en invierno confiere a este particular gigante amistoso un atractivo aún mayor.
Tenemos que subrayar que esta preciosa subida sólo puede llevarse a cabo si se cuenta con la condiciones meteorológicas adecuadas. Afortunadamente, la naturaleza es muy indulgente con los excursionistas en estos lugares, por lo que no suele ser un problema. Acompañado por un amable guía profesional, se acercará a Viševnik de forma agradable y sencilla desde un punto de partida considerablemente elevado. Un ascenso bastante empinado, pero muy factible, nos lleva por una ruta nevada muy trillada. Manteniendo el ritmo que más le convenga, llegará a una impresionante cresta de montaña. Unas vistas impresionantes de picos nevados le recibirán al llegar a la hermosa cumbre de Viševnik.
El Triglav y su vecino el pico Julianos, la onírica a vista de pájaro Vista de la encantadora meseta de PokljukaEn invierno, Viševnik ofrece todo esto y mucho más: las montañas de Bohinj, la llanura septentrional de Sava e incluso los Karawanks septentrionales y los Alpes de Kamnik-Savinja al este. Una ruta segura pero emocionante, tan idílica hacia abajo como hacia arriba: técnicamente poco exigente y de una belleza sublime. Una aventura invernal muy recomendable que es una magnífica práctica para futuras escaladas más atrevidas.
Distancia: 4,2 km (2,6 mi)
Elevación: 580 vm (1900 pies)
IMPORTANTE: Es obligatorio tener conocimientos en el uso de crampones y piolet, así como saber cómo detener una caída con un piolet.